El Grupo Municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Albacete interpuso recurso de reposición contra el acuerdo de la Junta de Gobierno Local de 24 de julio de 2014 por el que se aprobó el proyecto de construcción de la pasarela ciclista que unirá Albacete con el carril bici a La Ribera del Júcar/Tinajeros.

En el escrito de alegaciones este Grupo Municipal recordaba que esta obra – presupuestada inicialmente con 1.2 millones de euros, adjudicada por unos 700.000- se financia con cargo al Plan URBANITAS, es decir, con fondos europeos como parte de un proyecto cuyo eje debía ser la integración urbana de los Barrios Estrella y Milagrosa. Entre las legaciones citábamos que el proyecto de pasarela no había sido dictaminado en las Comisiones Informativas de Movilidad e Infraestructuras, Acción Social que habitualmente hacen el seguimiento de las medidas del Plan Urbanitas; tampoco fue tratado en reunión de seguimiento del Urbanitas, ni en el Consejo Social y de Sostenibilidad, ni en la mesa de movilidad habiendo sufrido cambios muy notables en la concreción de la obra (de conexión de carril bici a pasarela), tanto respecto a los beneficiarios de la misma como también en la cantidad presupuestada. También señalábamos que no se trata de una obra incluida en el PMUS aprobado el pasado año.

Pues bien, la JGL de 22 de diciembre adopta acuerdo de desestimar nuestro recurso, sin entrar al fondo de las cuestiones planteadas, que no han sido contestadas en absoluto. Se han dilatado en su respuesta casi 5 meses, la notificación se recibió el 12 de enero, cuestión que no es irrelevante pues, a estas alturas, la obra está iniciada. El argumentario de la Jefa de Servicio de Urbanismo, que transcribe el Oficial Mayor y la JGL, se limita a debatir si la recurrente acredita un interés legítimo, si el recurso se ha puesto en plazo y la recurrente cumple con el requisito de la legitimación activa (concluye que sí). Basa la desestimación en que no se justifica interés legítimo en invalidar el procedimiento de contratación, respuesta que no compartimos porque la finalidad de este proyecto difiere completamente del programa Urbanitas, tal como alegamos y, sin embargo, la JGL no quiere entrar en esos, sino que se limita a meras cuestiones formales sobre la conveniencia de haber recurrido el acuerdo previo del proyecto y no el inicio del expediente de contratación.

Frente a la negación del interés legítimo por la JGL, esta portavoz responde que nuestra actuación busca el interés general, primero de los ciudadanos a los que represento y luego de los beneficiarios de los fondos Urbanitas, ajenos al desarrollo del proyecto y al destino de las obras de la pasarela ciclista.

Izquierda Unida seguirá en su labor de denuncia de la pésima gestión del equipo de gobierno y la Alcaldesa, tanto del programa Urbanitas, tratado como mero trámite para acceder a fondos, como de la ignorancia y desconsideración de los problemas sociales y económicos de la población de los barrios Estrella y Milagrosa.

Por ello, además de otras iniciativas como la moción presentada en octubre (y aprobada) para dar continuidad a los programas PEBEM y FINDE, hemos cursado pregunta al Parlamento Europeo, a través de nuestra europarlamentaria Paloma López, para que se investigue y acredite si la obra de la pasarela ciclista sobre la A-31 cumple con la finalidad del Urbanitas y cuenta con la aprobación de la Comisión para su financiación con fondos FEDER. La pregunta se registró el pasado 27 de noviembre y estamos a la espera de su formulación, debate y respuesta.

El empleo de fondos sociales para una macro construcción, que no persigue un fin social y que, en la práctica, no incide en la integración de la población beneficiaria del programa, es una decisión equivocada y grave y por eso, en su momento, pedimos su paralización (moción de junio de 2014) y seguimos denunciando la mala gestión del PP. Entendemos que no se hace un buen uso de los fondos europeos y municipales previstos para el Urbanitas al destinarlos a una infraestructura de movilidad del conjunto de la ciudad. No es ético dedicar esta importante suma destinada a la mejora de dos barrios con problemas sociales y urbanísticos para solventar la barrera de la autovía A-31 o las vías de tren.

Además de lo anterior, desde IU consideramos que en estos últimos tres años se ha improvisado mucho en la gestión del Urbanitas y cuestionamos el poco empuje y la ambigüedad del equipo de gobierno al abordar el conjunto de medidas del programa bajo un enfoque de inclusión y cuando aún persisten graves desigualdades en los citados barrios y crece la población en riesgo de exclusión en el conjunto de la ciudad y de la región.

Insistimos además que esta actuación se ha hecho a espaldas de la “población beneficiaria” del Urbanitas. Con este proyecto, y con la gran mayoría de las medidas de medio ambiente urbano, desarrolladas o pendientes, no se ha contado con la población ni con los técnicos y asociaciones que trabajan en estos barrios, echando por tierra la participación y la implicación y ciudadana, así como el consenso político que debía primar en el desarrollo del Plan Urbanitas.