Posición de IU respecto a las ordenanzas fiscales de 2014

Es un engaño: seguimos teniendo más de 20.000 parados en la ciudad, cada vez más pobreza y no han tomado medidas contundentes para afrontar este asunto la crisis sigue castigando a los vecinos y vecinas de Albacete.

El déficit del Ayto ha cambiado de lugar, se ha trasladado a los bancos y aún se sigue debiendo. El PP no sanea las cuentas, devalúa los servicios municipales con sus políticas de ajuste. El ahorro se hace a cuenta de todos: despidos, cierres, elevación de precios públicos y tasas. Los servicios municipales cuestan más a los ciudadanos.

La Junta sigue debiendo a este Ayto y el PP se calla. Ejemplo de uso demagógico y populista de la acción del gobierno: La mentira de la bajada de impuestos “la mayoría de ciudadanos pagarán más en 2014”.

El anuncio sirve para mantener el discurso del PP: “la crisis está remontando, ya se ha enjugado el déficit, empezamos a cumplir algunas promesas electorales”. Pero todos los términos de esta afirmación son falsos.

El déficit del Ayto ha cambiado de lugar, se ha trasladado a los bancos y aún se sigue debiendo. La deuda por habitante ha crecido en los años de gobierno de Bayod. El PP no sanea las cuentas, devalúa los servicios municipales con sus políticas de ajuste. El ahorro se hace a cuenta de todos: despidos, cierres, elevación de precios públicos y tasas. Los servicios municipales cuestan más a los ciudadanos.

La promesa electoral de la bajada de impuestos no es real, si hacemos balance de los tres ejercicios económicos del PP y ni siquiera de la propuesta para 2014.

Las ordenanzas que marcan los impuestos, tasas y precios públicos para 2014 son el instrumento de recaudación que define en gran medida los ingresos municipales. Como el pasado año, el Plan de Ajuste 2012-2022 condiciona todo el presupuesto para el año 2014 y siguientes y define la política municipal del PP. No nos sentimos vinculados a la gestión económica que hace el PP (cierres de servicios, despidos, ahorro en capítulo 1 sin negociación, préstamo de 32,7 M€, etc.).

Este año, el PP ha dado a conocer el contenido de las ordenanzas a los medios de comunicación por anticipado (la alcaldesa en Talavera y el portavoz el pasado jueves), antes de hacerlos llegar a los grupos de la oposición (se nos entregó el viernes). No ha habido voluntad alguna de negociar.

Además, en el caso de la subida del IPC este año se da en una situación de pérdida generalizada de poder adquisitivo para la mayoría de ciudadanos pues a las bajadas de sueldo y de prestaciones se añade la subida de impuestos, en particular la del IVA. Por tanto, se aumenta la presión fiscal a los ciudadanos cuando estos ya están pagando las consecuencias de la crisis y la mayoría de las familias dispone de menos servicios colectivos y renta disponible. La pérdida de poder adquisitivo de los empelados públicos acumulada desde 2010 es de un 15%.

IU quiere dejar claro que el balance del gobierno municipal del PP es de subida de 3-4 puntos porcentuales en impuestos, mucho más si hablamos de tasas y precios públicos. El saldo de su mandado será una subida neta de impuestos, aunque baje un punto o dos el año próximo pues subió en IPC los dos años anteriores (>5%).

Hay que añadir que esta subida redunda en encarecimiento injusto de los servicios municipales pues se hace en un contexto de descenso salarial, incremento del paro y la pobreza, subida del IPC, etc., en suma, Bayod ha contribuido con su balance fiscal a la pérdida de poder adquisitivo de los vecino y vecinas de Albacete.

Además, en 2013 se suprimieron algunas de las ayudas del euro solidario (bus urbano), aunque se ha mantenido la bonificación del 75% en el recibo del agua y basuras.

En general, en IU hemos defendido que impuestos y tasas se adecúen al IPC acumulado desde la última revisión (en 2013 el IPC interanual de agosto es un 1,5%), ya que es una garantía para mantener los actuales servicios municipales. Nuestra posición (de años anteriores) ha sido progresividad fiscal, adecuaciones al IPC de impuestos y tasas (en general), bonificaciones y subvenciones a familias y colectivos con problemas socioeconómicos acreditados (mantenimiento de medidas anti-crisis, en este sentido), progresividad ambiental (por ej. respecto a consumo de agua y en el impuesto de circulación) y acercamiento de precios y tasas al coste de servicios de manera gradual y teniendo en cuenta criterios de renta.

Una promesa preelectoral con intención de hacerse perdonar el Plan de Ajuste y la inoperancia para afrontar los problemas económicos de la ciudad. ¿Un anuncio para hacer revalidar su propuesta como candidata a la alcaldía frente a su partido?.

El anuncio de Bayod de congelación de precios públicos y tasas viene precedido por un aumento desproporcionado de estos en determinados servicios en el año 2012. Sirva como ejemplo el IMDA, en el que algunos de los precios se incrementaron en más de un 250%, que ha tenido como consecuencia directa una importante pérdida de usuarios, y por ende, de cursillos y actividades. Otras subidas importantes han sido la tarifa por aparcamiento en zona azul, el autobús urbano, las nuevas tasas de las escuelas infantiles, por matrimonio civil, etc.

Y en su balance Bayod dejará a esta ciudad con más deuda y menos servicios públicos. Respecto a la deuda, un dato es concluyente: el endeudamiento medio por habitante ha subido de 462€ en 2011 a 808€ en 2013, lo que supone endeudarnos en más de un 75%. Respecto a los servicios públicos: toda la destrucción de empleo (casi 200 despidos), pérdida continuada de servicios y programas municipales dibuja un panorama desolador. Hay una lectura más realista y más gris de la etapa municipal de Bayod que los ciudadanos deberán tener en cuenta a la hora de dar su confianza o desaprobar a este equipo de gobierno.

El argumento estrella de la gestión económica de Bayod es que han contenido el gasto y pagado a proveedores. Pero ese balance surge de un préstamo que cualquier equipo de gobierno hubiera pedido al inicio de mandato para el pago a proveedores y la contención del gasto se ha hecho a costa de los ahorros en personal (disminución de la masa salarial, capítulo 1), cierre de servicios y programas, nulas inversiones y algunos recortes en gastos corrientes y transferencias.

Pero, además de todo, no hay tal bajada de impuestos y congelación de tasas y precios públicos. Hay de todo: subidas del agua y de la Ayuda a domicilio; bajadas mínimas (ridículas) del IBI, impuesto de circulación o de plusvalía y congelación de precios y tasas que subieron de manera desproporcionada el pasado año y que ahora mantienen, pero que merecen nuestro rechazo (este año y el pasado). El titular del PP es una engañifa en toda regla y nuestra obligación es desmontar su discurso “de bajada de impuestos y de haber saneado las cuentas municipales”. Para ello, vamos a profundizar en las propuestas concretas y a repensar nuestra posición ante cada ordenanza, tasa y precio público para ser coherentes y dejar claro que no es tan fácil engañar a la gente con su propaganda populista.