Vivimos momentos que podríamos calificar como de crisis de la política, marcada por una distancia y desconfianza de los ciudadanos con esta. Desde Izquierda Unida pensamos que es necesario recuperar la confianza de los ciudadanos transformando los modelos de gobernanza y adaptándolos a los nuevos tiempos.

Creemos que la democracia participativa y la transparencia son las vías para conseguir una gestión municipal eficiente y próxima a la ciudadanía. La apuesta por los denominados “gobiernos abiertos” se basa en el establecimiento de canales de comunicación permanentes que permitan la participación efectiva en los procesos de decisión y el control ciudadano de la administración. Es esencial que avancemos en los procesos de empoderamiento ciudadano si queremos revertir las malas prácticas políticas (corrupción, clientelismos, financiación irregular de partidos, enriquecimiento ilícito de particulares, etc.), devolver la confianza de los ciudadanos con las instituciones democráticas y la dignidad a la acción política.

Un gobierno transparente fomenta y promueve la rendición de cuentas ante la ciudadanía y proporciona información sobre lo que está realizando y sobre sus planes de actuación. Por poner un ejemplo, los datos sobre ordenanzas, normativas, nombramientos y subvenciones deben estar al alcance de cualquier ciudadano que lo solicite.

El Ayuntamiento de Albacete debe permitir el acceso de los ciudadanos a la información de manera clara y sencilla para que estos puedan ejercer su derecho a controlar y conocer la acción de gobierno.

El pleno del Ayuntamiento de Albacete aprobó, en abril de 2010, un Código de buen gobierno local para evitar la mala gestión y la falta de transparencia, que cuenta con epígrafes sobre: mejora de la gestión y la calidad de la democracia; incompatibilidades de los cargos públicos; publicación de declaraciones de actividades y bienes; retribuciones económicas de los electos; medidas de democracia participativa y mecanismos para la difusión y cumplimiento del código.

El Código, además, incluye principios de obligado cumplimiento para las personas electas como la honestidad, imparcialidad y austeridad con la que deben ejercer sus funciones los cargos públicos. Para mejorar la gestión y la calidad de la democracia local contempla, entre otras, la creación de comisiones de seguimiento en la contratación pública; la constitución de mecanismos para profundizar en la participación de los vecinos y hasta cerca de 60 medidas dedicadas a fomentar la transparencia de la gestión municipal y acercar la política a la ciudadanía que no se han desarrollado en su totalidad.

El pasado mes de marzo, el Ayuntamiento de Albacete aprobó en Pleno su integración en la Red de Entidades Locales por la Transparencia y Participación Ciudadana promovida por la Federación Española de Municipios y Provincias. Además, se ha iniciado la adaptación de la normativa estatal sobre transparencia y acceso a la información y, antes de final del año 2015, hay que debatir y promulgar la ordenanza sobre transparencia y acceso a la información en aplicación de la Ley 19/2013.

En opinión de IU, el gobierno municipal del PP, liderado por Bayod, no ha sido transparente en el Ayuntamiento de Albacete ni ha promovido la participación. Al contrario, hemos retrocedido notablemente en materia de participación y se ha enlentecido sobremanera el acceso a la información sobre toma de decisiones, planes de gobierno, compatibilidades de los concejales del equipo de gobierno, declaraciones de actividad, política de nombramientos de cargos de libre designación, etc.

Para poder tener un diagnóstico riguroso y objetivo de la situación de partida y los ámbitos de mejorar, el Grupo municipal de Izquierda Unida propone al pleno municipal con esta moción evaluar el cumplimiento del Código de Buen gobierno del Ayuntamiento de Albacete aprobado en abril de 2010. Para ello, el Ayuntamiento de Albacete constituirá un grupo de trabajo con representantes políticos, ciudadanos y técnicos de Participación y Calidad.