Izquierda Unida Albacete se suma a la denuncia contra los nuevos regadíos del Segura por “irregulares y antisociales”

Izquierda Unida Albacete se suma a la denuncia que ha llevado a cabo la Plataforma en defensa de las fuentes contra la concesión de nuevos regadíos en la Sierra del Segura que, bajo la etiqueta de “sociales”, solo benefician a grandes terratenientes. La Plataforma asegura que los cuatro nuevos proyectos de regadío autorizados en la provincia de Albacete suponen un uso fraudulento del agua.

A pesar de ser vendida como de interés social, la realidad, aseguran, es que la concesión 7,1 hectómetros cúbicos de agua subterránea para riego en el Segura albaceteño beneficia principalmente a terratenientes y grandes empresas agrícolas y, además de contener graves irregularidades. 

En el expediente CPR-128/2019 -relativo a la regularización de unos regadíos ilegales creados en 2004, y su futura ampliación en Peñarrubia (Elche de la Sierra)-, se señala claramente que el pozo estaría captando de un acuífero «no delimitado ni evaluado en el Plan Hidrológico».

La Plataforma también señala que en los expedientes de Alcadozo y Nava de Arriba (Pozohondo), que podrían afectar a las fuentes de Ayna y Liétor, se utiliza una declaración de interés nacional  desfasada -pues data de 2003- y bajo el paraguas del genérico «otros» -en referencia a otros términos municipales, distintos de los citados explícitamente en la declaración-.

Como explican desde la Plataforma,  por el Plan Hidrológico de 1998, se sabe “era de aplicación únicamente a la cuenca vertiente de los embalses del Talave y del Cenajo, y sin embargo -desde la Consejería de Agricultura y la Confederación Hidrográfica del Segura- han pretendido aplicar la declaración de interés nacional fuera de este ámbito territorial, y en fraude de ley”. 

Los regadíos, además, tienen muy poco de sociales, la mayor parte de la superficie transformada pertenece a grandes terratenientes que residen en ciudades, o a empresas agrarias con sede en Murcia y Alicante. La concesión se la reparten entre seis propietarios con fincas de más de 100 hectáreas.

Así, en el expediente CPR-1/2018 (relativo a los regadíos de Hellín) apenas seis propietarios suman 813 hectáreas -la mitad de la superficie objeto de las concesiones-, y participan de la transformación grandes empresas como CEFUSA, con 25 hectáreas.  En contraste con estos grandes propietarios, existen también en ese mismo expediente 68 pequeños agricultores que se reparten menos de 100 hectáreas en total.

Los nuevos regadíos, altamente tecnificados, apenas generarán empleo en la zona. Tomando datos de la propia Consejería de Agricultura, hace falta transformar 100 hectáreas de almendro de secano a regadío para generar 1 UTA (unidad de trabajo anual), y 31 hectáreas en el caso del olivar.

Sin embargo, se esperan importantes plusvalías para los propietarios de los terrenos al pasar el precio de 300 euros por hectárea en secano a 2.546 euros en regadío para la transformación de almendros, y de 500 a 1.400 euros para la transformación de olivos.

Para Izquierda Unida Albacete este tipo de concesiones inciden en una política insostenible, que se produce en una situación de sobreexplotación generalizada de la cuenca del Segura, una zona en la que se espera una fuerte reducción de los recursos hídricos debido al cambio climático -del orden del 40% para final de siglo-, y donde la prioridad absoluta debería ser una drástica reducción de la superficie regada y el cambio a cultivos menos intensivos en agua.