(Martes 14 de octubre de 2014)Izquierda Unida de Albacete ha participado esta mañana en la concentración convocada por las trabajadoras afectadas por los impagos de Limpiezas Raspeig adjudicataria del servicio de limpieza de la Residencia de Mayores del Paseo de la Cuba.

Victoria Delicado y Héctor García, Concejala y Coordinador local de IU, han apoyado la jornada de huelga y las reivindicaciones de las trabajadoras dado que, hasta ayer, les adeudaban las nóminas de los últimos dos meses, sin que se haya dado una respuesta concreta sobre estos incumplimientos por parte de la empresa. Echan en falta un apoyo institucional claro ya que no sólo la adjudicataria no paga las nóminas de sus trabajadoras; sino que además el Gobierno de CLM, hace caso omiso ante esta situación, no ejerce sus funciones para obligar a esta empresa a cumplir sus responsabilidades; y encima siguen adjudicando a Raspeig nuevas contratas públicas, según nos informan los representantes sindicales de las trabajadoras.

Desde IU además de mostrar nuestra solidaridad a las trabajadoras cuestionamos duramente las escasas miras políticas del gobierno de la JCCM, representado en Albacete por Javier Cuenca, que, según las propias trabajadoras, no ha tenido a bien recibirles ni tramitar diligencia alguna para solventar esta irregularidad en el cobro de las nóminas del servicio. Nos informan también que hoy les han abonado una de las nóminas atrasadas y que no consentirán, bajo ningún concepto, entrar en la dinámica de que se les pague con retraso de dos meses y a cuentagotas.

Son 265 trabajadoras a nivel regional, 32 de ellas en Albacete del servicio de limpieza de la residencia las afectadas por los impagos, al igual que otras compañeras de la plantilla de Raspeig encargadas de la limpieza de numerosos centros y sedes oficiales de la JCCM, del Ministerio del Ejército y del IMSERSO, en las cinco provincias de CLM.

Desde IU Albacete nos parece totalmente grave e irresponsable la dejación de funciones que hace el gobierno de Cospedal al no velar o exigir a la empresa adjudicataria el fiel cumplimiento de sus obligaciones, o algo más grave aún si es el caso, no pagar a la empresa adjudicataria las liquidaciones mensuales acumulando atrasos. Las trabajadoras no pueden pagar el plato roto de las negociaciones o diferencias entre la administración y empresas máxime cuando se trata de un servicio público tan necesario y sensible como una residencia de mayores.