Rueda de prensa de Ganemos-Izquierda Unida


Los diputados provinciales de Ganemos-Izquierda Unida, Victoria Delicado y José Ignacio Díaz, han presentado esta mañana las mociones que llevarán al pleno del próximo día 1de diciembre para su aprobación en la que Ganemos-Izquierda Unida va a pedir al pleno de la Diputación de Albacete que apoye la modificación de la regla de gasto que impide a los ayuntamientos con superávit invertir y prestar servicios a los ciudadanos; y que se oponga a la instalación de macrogranjas porcinas y defienda la ganadería extensiva.

Ganemos-Izquierda Unida, ha explicado José Ignacio Díaz, va a llevar al pleno una propuesta de “solidaridad” con el Ayuntamiento de Madrid en la que, además, insta a la “retirada” de los controles financieros impuestos al mismo por considerarlos un ataque “injustificado” a la autonomía local reconocida por la Constitución.

Además, la propuesta incluye una petición para promover una reforma de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera que modifique la regla de gasto.

El objetivo, como ha comentado Díaz, es que aquellos ayuntamientos que cumplan con los criterios de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera puedan invertir el superávit fiscal y asegurar la prestación de los servicios públicos por encima del pago de la deuda. De esta forma se asimilarían los “requisitos impuestos a los ayuntamientos a los exigidos al Estado y a las comunidades autónomas”.
 
La segunda de las iniciativas es una apuesta clara por la agricultura tradicional y la ganadería extensiva del ovino y caprino, respetuosa con el medio ambiente, que ha demostrado su sostenibilidad, y las explotaciones familiares y de rechazo a las macrogranjas porcinas intensivas que están intentando instalarse en la provincia.

Unas macrogranjas que, como ha detallado Victoria Delicado, están generando un importante “rechazo” y traen más “perjuicios que beneficios” en aquellas zonas donde son aceptadas:, ya que generan olores, impacto visual, proliferación de insectos y roedores, contaminación del suelo y aguas subterráneas por el purín… inconvenientes, a los que hay que sumar que estas granjas producen gases de efecto invernadero, principalmente metano, que son evacuados directamente a la atmósfera, sin realizar tratamiento alguno. Además, apenas crean empleo ya que la mayoría de las tareas están automatizadas.

En estos momentos hay varias peticiones para instalar este tipo de granjas, alguna con hasta 100.000 lechones, que en el caso de Castilla-La Mancha se ven beneficiadas por una línea de subvenciones creadas por el Gobierno regional para la instalaciones agropecuarias.

Ganemos-Izquierda Unida va a solicitar al pleno que rechace este tipo de ganadería intensiva, apueste por la agricultura y la ganadería tradicional y respetuosa con el medio ambiente y traslade a la Junta la petición para excluir de las ayudas a instalaciones agropecuarias a iniciativas de macrogranjas porcinas.