El pleno de la Diputación de Albacete, celebrado este pasado lunes, ha dado el visto bueno a la propuesta de Ganemos-Izquierda Unida de modernizar la línea Chinchilla-Cartagena.

La moción, que ha contado con el acuerdo de todos los Grupos Políticos (Ganemos-Izquierda Unida, PP, PSOE y Ciudadanos), plantea la necesidad de modernizar la línea Chinchilla-Cartagena, y su inclusión en las obligaciones de servicio público del Ministerio de Fomento, por constituir ésta una plataforma logística y estratégica de primer orden.

Así, a través de este acuerdo plenario, se instará al Ministerio de Fomento a incluir esta línea en la red básica de transportes, solicitando además al Gobierno central que ponga en marcha las actuaciones de adecuación y modernización necesarias.

La moción incluye entre los objetivos demandados a Fomento el “desdoblamiento y la electrificación” del trazado para hacerlo apto al tráfico de mercancías y viajeros, además de modernizar la vía para que se puedan alcanzar velocidades de 200-220 kilómetros hora sobre ancho ibérico que pondría Murcia a una hora, la supresión de los pasos a nivel y el vallado del recorrido.

También se pide al Ejecutivo central que en su contrato con RENFE se incluya el trayecto Chinchilla-Murcia y que esta línea se tenga en cuenta en la Red Básica Transeuropea, que se definirá en 2023, “para que esta vía se tenga en cuenta en las inversiones de la Unión Europea”.

El pleno también ha acordado la solicitud, por parte de la Diputación, de la inclusión dentro de esta línea ferroviaria de la estación de Hellín, apeadero donde, además, pararían los trenes híbridos de la Serie 730, tipo Alvia, ya en circulación.

Los diputados han debatido también la propuesta de Ganemos-IU para modificar los criterios de aplicación de la regla de gasto, solicitando que el dinero de los Ayuntamientos no se destine solamente a obras públicas y pueda ir dedicado a otras partidas importantes para la ciudadanía.

La relajación en la aplicación de la regla de gasto es una reivindicación con la que está de acuerdo la Federación de Municipios y Provincias (FEMP). Las políticas de austeridad “están ahogando” a las administraciones más cercanas a los ciudadanos, los ayuntamientos, a pesar de ser los que más han cumplido a la hora de contener el déficit público y de que la mayoría tienen superávit en sus cuentas.