El pleno de la Diputación de Albacete ha dado, esta mañana, su apoyo a la modificación de la regla de gasto impuesta por el Ministerio de Hacienda a los ayuntamientos que les impide invertir en servicios el superávit presupuestario.

La corporación ha mostrado en dos ocasiones, durante el pleno, su disposición a pedir cambios en la regla de gasto, aprobando dos iniciativas en el mismo sentido presentadas por el Partido Socialista y por Ganemos-Izquierda Unida. Una regla de gasto que, en palabras del diputado José Ignacio Díaz, está “impidiendo que los ayuntamientos pueden desempeñar los servicios que les son propios, a la vez que es utilizada por el Gobierno central para enmascarar el déficit en el que incurre año tras año”.

La iniciativas de Ganemos-Izquierda pide a la corporación que muestre su “solidaridad” con los ayuntamiento afectados por la intervención de Hacienda, como es el caso del Ayuntamiento de Madrid, para poder invertir su superávit e insta a la “retirada” de los controles financieros impuestos al mismo por considerarlos un ataque “injustificado” a la autonomía local reconocida por la Constitución. Además, incluye una petición para promover una reforma de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera que modifique la regla de gasto.

El objetivo es que los ayuntamientos, “que son las administraciones públicas más saneadas y a a las que se les pide un mayor esfuerzo, a pesar su insuficiente financiación”, puedan invertir el superávit fiscal y asegurar la prestación de los servicios públicos por encima del pago de la deuda. De esta forma se asimilarían los “requisitos impuestos a los ayuntamientos a los exigidos al Estado y a las comunidades autónomas”.

La Diputación también ha aprobado la moción de rechazo a las macrogranjas porcinas que, en los últimos meses, han pedido licencia para instalarse en la provincia albaceteña.

El pleno ha considerado que, como ha explicado la diputada de Ganemos-Izquierda Unida, “estas instalaciones, que apenas crean empleo, presentan más inconvenientes que beneficios”, como viene reclamando la Plataforma Stop Macrogranjas Pueblos Vivos.

La moción aprobada hace una clara apuesta por la agricultura tradicional y la ganadería extensiva del ovino y caprino, respetuosa con el medio ambiente, que ha demostrado su sostenibilidad, y las explotaciones familiares y de rechazo a las macrogranjas porcinas intensivas que están intentando instalarse en la provincia.

Por contra, las macrogranjas, como ha detallado Delicado, generan un importante “rechazo” al producir olores, impacto visual, proliferación de insectos y roedores, contaminación del suelo y aguas subterráneas por los purines… inconvenientes, a los que hay que sumar que estas granjas producen gases de efecto invernadero que son evacuados directamente a la atmósfera, sin realizar tratamiento alguno. Además, apenas crean empleo ya que la mayoría de las tareas están automatizadas.

“No generan riqueza económica ni social, perjudican el turismo y, como ha recordado al Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Albacete en un reciente informe son incompatibles con la protección del suelo necesitan un elevado consumo de agua”, ha comentado Delicado.

Además, Ganemos-Izquierda Unida ha rechazado la moción presentada por el PP para “reprobar” al diputado delegado de los Servicios Especiales de Prevención y Extinción de Incendios (Sepei) al “no ver razones” para apoyarla, y sí ha recordado que lo que “urge” es sacar la plaza de la jefatura de este servicio, “igual que la de Recursos Humanos”, petición reiterada por este grupo.