Albacete, 26 de noviembre de 2020

La educación es el principal pilar para garantizar el bienestar individual y colectivo, la igualdad de oportunidades, la calidad democrática y la prosperidad económica.

Ante las falsedades que se están vertiendo sobre la Ley Orgánica de modificación de la LOE (LOMLOE), conocida como Ley Celaá, desde Izquierda Unida Albacete queremos mostrar nuestro apoyo a una reforma educativa necesaria.

La reciente reforma educativa no colma todas las propuestas de IU, entre otros aspectos carece de una apuesta mayor y más decidida por la educación pública como eje vertebrador del sistema educativo y como única garante del derecho universal a la educación en condiciones de igualdad, y mantiene las religiones en la escuela pública, pero supone un avance positivo con respecto a la regulación anterior.

La nueva Ley educativa viene a garantizar la igualdad de oportunidades, busca modernizar el sistema educativo, al centrarlo en el alumnado y su potencia a desarrollar y, entre otras cosas, elimina los itinerarios segregadores desde los años.

La LOMLOE no elimina la educación concertada, corrige la segregación del alumnado por razones socioeconómicas, sexo u otras razones. Los centros concertados no podrán recibir cuotas de las familias por las enseñanzas de carácter gratuito, ni directamente ni a través de fundaciones o actividades extraescolares.

La norma dotará a los centros educativos de los recursos necesarios para atender al alumnado con discapacidad, y se apoyará a centros de educación especial para el alumnado que requiera atención muy especializada. La religión pasa de ser obligatoria a voluntaria. Los centros deben ofertarla, pero la elección es voluntaria. Además, la nota no se tendrá en cuenta en los procesos de acceso a la universidad o la concesión de becas. 

Se promoverá el desarrollo de la competencia digital de todos los estudiantes en todas las etapas educativas, para atajar los problemas detectados como la brecha digital.

El alumnado deberán adquirir un conocimiento profundo de la historia de la democracia en España, que deberá plantearse desde una perspectiva de género.

Se garantiza el derecho a recibir educación en castellano y en lenguas cooficiales, en aquellas comunidades con más de una lengua oficial, para alcanzar un dominio pleno.

La nueva Ley presta una atención especial a la escuela rural, reforzando la orientación y la acción tutorial, e impulsa la participación de la comunidad educativa en la gestión de los centros.